domingo, 22 de julio de 2012

Pijadas: AMOR EN TIEMPOS DE CRISIS.

Bueno , pues tal y como os prometía el otro día al hablar de mi viaje de lujo (que al final no fue tal si no todo lo contrario y solamente faltó Marianico El Corto dándome el beso de buenas noches), hoy toca hablar de mi viaje de amor: LOS ESTATEEEEEEESSSSSS!

Anna Nicole Smith y sus afamadas dotes como repostera dicharachera.

Resulta que mi señora trabaja para una universidad yankee muy conocida aquí en los madriles. Decir que eres diseñador y que tu señora trabaja en una universidad cojonuda, a ojos extraños, puede resultar la rehostia y seguramente haya alguno en este mismo momento imaginándose a un par de treinteañeros viviendo en la opulencia, lanzando cristales del Eroski como una camboyana lanza pelotitas de ping-pong sumergidos en una orgía de botellas de Taittinger y empachados, ya, de caprichos varios.

Pues no, ni un puto duro, oigan. La sobrecualificación es lo que tiene...

El caso es que ella se va de conferencia a California y he decidido acompañarla después de llevar ahorrando ni sé la cantidad de tiempo gracias al haber dejado de fumar, sacrificar las borracheras del fin de semana y acogiéndome bajo el amparo de PelisYonkis como antes me acogía al caliente regazo de Marisa, la taquillera del cine de mi barrio:

Estampado para Stanford University © ABE THE APE.

Y aunque somos dos pardos sin carnet de conducir y no habrá excursión a Yosemite:

Ese parque que de pequeño siempre confundes con el del Oso Yogui.

Si que la he convencido para escaparnos un par de días a Disneylandia:

El lugar en el que doy rienda suelta a mi tontuna.

Y sentirme como Annette Funicello:

Annette & Jimmy en el Mickey Mouse Club.

O un mouseketeer:

Mouseketeer con carencia de brackets.
Mouseketeer con abundancia capilar.

Ya que me conozco todas las vías para disfrutar como es debido de un parque Disney:

Lo que viene siendo de toda la vida de Yves un three-way vamos...

Desde contemplar sus maravillosos ejemplos arquitectónicos que mezclan estilos que van del medievo hasta el muñequito del Happy Meal:


A degustar su exquisita oferta gastronómica:


Sin olvidarnos de esos espectáculos que siempre me hacen echar la lagrimilla:

Pluto Rules!

O de hacer las consabidas fotos con los muñecajos para que luego, al ponerlas en el Facebook, todo el mundo tenga la absoluta certeza de que sí, que soy un poco mongolín:

Rubia buscando lo más vital, en este caso marcarse un trío con un oso y un orangután.
Angela Merkel con Los Rescatadores.

Pero yo seré feliz y me olvidaré por unos días del trabajo (que me encanta, no se crean, pero del que siempre debemos quejarnos. Derecho inherente de todo ser humano y que nos diferencia de los animales):


Sobre todo cuando por fin me enfrente a la atracción de Indiana Jones!:


O esa que acaban de abrir basada en Cars:


Y es que uno siempre ha sido muy fan de Disney por mucho que viva en un país en el que se ha pasado del landismo al tontismo más absoluto en cuestión de décadas y en el que parece que está mal visto que te gusten los productos de la factoría del ratón. Bueno, la verdad es que miento!... si eres gordo, sociópata o marica, la cosa como que es más tolerada por la sociedad.

Cuando ya eres marica y gordo al mismo tiempo, la cosa como que es casi que obligatoria. Algo así como ser bollera y tener un gato pero con el Supercalifragilisticoespialidoso sonando de fondo.

Si encima se es un devorador de cine en general y del de animación en particular, que es ver unos cartoons de Tex Avery, Chuck Jones o la UPA y puedo pasar el resto del día descojonado de la risa, que amaré a los Looney Tunes sobre todas las cosas, o que para tirarme el pisto tengo en mi casa material de Harryhausen, los Hermanos Quay, Lotte Reigner o Byll Plympton, pues como que nunca entenderé el desprecio general ante tal insigne productora.

Por supuesto que tiene sus cosas, no seré yo el que las niegue, pero estas se acaban convirtiendo en virtudes cuando oigo a la gente soltar sus peregrinas razones a la hora de justificar tal odio: "Es que los perros cantan!", "Es que se dice que Disney colaboraba con los nazis!", "Es que siempre acaban bien!"... polleces.
Solamente eso. Nada más.

Al menos ya no venden mazapanes en el Lidl.

Vale que Disney es ñoñez y cierto tufillo retrógrado, negarlo sería de tontos, vale que es sexista y sus heroínas mononeuronales; pero todo esto se esfuma cuando miras más adentro y te das cuenta que Disney desde su creación ha sido innovación artística y tecnológica, ha sido riesgo, sordidez, profundidad, canciones inolvidables, perfección en el trazo, personajes carismáticos y un mimo en el detalle casi enfermizo.

Pero sobre todo ha sido pre-producción. Nada me puede gustar más que un buen concept art y en eso Disney (y PIXAR) son amos y señores. Y ya cuando te fijas en la nómina de artistas que han pasado por allí casi que te dan los siete males, desde Kay Nielsen a Gerald Scarf pasando por Mary Blair, Bill Tytla, Gustaf Teggren, Peter DeSeve o Eyvind Earle han contribuido a convertir los archivos secretos de los estudios Disney en un impresionante museo lleno de obras de arte que nunca serán valoradas como se merecen por parte de la crítica más sesuda, coñazo y pereza que el mundo pueda conocer:


Tal es mi admiración que hasta intenté que mi tesis final estuviese basada en Disney, pero me la descartaron, no es fashion, dijeron...

© ABE THE APE

Otra de las paradas será San Francisco, esa ciudad que todos nos imaginamos llena de gente en chanclas y camiseta y que en realidad tiene un microclima que te deja los huevos cubito desde que entras en sus límites hasta que los abandonas.

Pero me apetece muchísimo ir porque debe ser una ciudad maravillosa y, sobre todo, por ver a mi señora caminar por sus encuestadas calles ya que no la ha llamado el Señor nuestro Yves por la senda del paseo.


También podré comprobar como reacciona su pelo ante tanta niebla:


Y ver si nos pilla el Gran Terremoto para así tener una aventurilla que contar a los nietos el día de mañana:


Pero San Francisco sobre todo me recuerda a cine, que es lo que me pasa siempre con las ciudades yankees, pues de tanto verlas en la gran pantalla luego las concibo como un enorme plató cinematográfico.

Así San Francisco me recuerda a Michael Douglas y Karl Malden dando pol culín a la quinquillería, al vampiro Lestat cantando el Sympathy for the Devil de sus satánicas majestades en boca de Axl Rose & Co. mientras se atusa los puños de su raída camisa al volante de un maravilloso Mustang, a asesinos del zodiaco, diseñadoras de sujetadores con amigos que sufren de vértigo, policías violentos, días de vino y rosas con finales de nudo en garganta, tortilleras ultrafollables con picahielos, Rita Hayworth oxigenada (y más bella que nunca), remakes inconfesos de La fiera de mi niña que no tienen nada que envidiar al original, padres forzosos, Jacqueline Bisset con el chocho agua-limón al ver como se las gasta en coche Follardín McQueen o madres de prometidas bastante más jincables e interesantes que las sosainas de su hijas:


John Stamos.
Tom Cruise © Stan Winston Studio.
A view to kill © Bryan Bysouth.
A view to kill © Daniel Goozee.
Tippi Hedren en The Birds.
Barbara Bel Geddes en Vértigo.
Ryan O´Neill & Barbra en What´s Up Doc?
Clint Eastwood en Dirty Harry.
Joven Clint.
Póster japonoide de Bullit.
Lee & Jack en Days of wine and roses.
Siempre he querido tener un pájaro.
Y una gachí como Rita!
Rita Hayworth en The Dame of Shangai.
Anne Bancroft en El Graduado.

Lo mismo me pasa con Los Angeles, esa ciudad deshumanizada al más puro estilo Fritz Lang hecha de hormigón, colágeno, autovías y cartón piedra, en la que turistas, yonkis, homeless y putas conviven en perfecta armonía en un paseo lleno de estrellas de latón.

Jodida feria de vanidades, basura, puñaladas y felaciones que se disfrazan de glamour y camaradería ante unos fetuccini de Spago.

Y es que L.A. me recuerda a estrellas emergentes que sumen en una vida de jodienda a sus maridos a causa del celo profesional, a actores que paran sus Ferraris en Sunset Boulevard con la esperanza de poder descargar todas las tensiones que llevan dentro y, por ende, a Divine Brown o el travelo que se pilló Eddie Murphy para "llevarlo a su casa", a restricciones de agua, narices cortadas, putas de buen corazón, putas provincianas de enorme parecido a Veronica Lake, putas por el placer de serlo, putas cercenadas, dalias negras, productores que se hacen pasar por mendigos en plena depresión, estilistas mariquitas que sin embargo no dejan hembra por catar y conejos catados por hembras porque las hacen reír:


Joan Collins tan sencilla como de costumbre.
Que os jodan Brangelina! © Herb Ritts.
Las tetas de Barbara Stanwyck.
Pasaba por allí...
... y yo se la mamé!
Pobre Vero, tan desgraciada como bella y talentosa.
Goldie, Warren & Julie en Shampoo o como no puede existir trío más molón.
Judy en Ha nacido una estrella © Amsel.
¿Llevas un conejo en el bolsillo o es que te alegras de verme?
La lluvia de ranas más hermosa que mis ojos hayan visto.
Grrrrrrrrrrrr!
Antes de privatizar el Canal de Isabel II.
Las estrellas se forjan en las calles. De toda la vida de Yves!
Quitarse una peluca, ponerse un albornoz, sonreir y ya está. Todos a sus pies!
Nunca una traducción tan irrespetuosa fue tan grande: Cautivos del mal!
Vuélvete a Jersey! Esto es Los Ángeles y tú no tienes alas!
Los orígenes del "Sálvame".
La ciudad de la alegría.

Y es que Hollywood mola, pero más por su leyenda negra que por los brillos del éxito. Para ejemplo un botón. Con ustedes la maravillosa DANA PLATO.

Dana fue una actriz muy popular gracias a una serie de televisión que murió a los 35 años a causa de  una sobredosis de Vanadom y Vicodin (Estados Unidos, esa nación a un bote de pastillas pegada, posee los nombres de medicamentos y drogas legales más maravillosos del mundo).

En sus 35 años de carrera tuvo tiempo para ser estrella infantil, estrella juvenil, fundirse toda su fortuna, ser arrestada por robar una tienda de vídeos o por falsificar una receta de Valium, divorciarse, perder la custodia de su hijo Tyler, hacerse alcohólica y farlopera, posar desnuda para Playboy, intentar suicidarse en varias ocasiones, operarse los pechos para conseguir papeles, ser la primera celebridad en prestar su voz a un videojuego, rechazar los papeles protagonistas de El exorcista y La Pequeña y acabar sus días declarándose lesbiana, viviendo en una caravana y protagonizando películas de porno blando.

Tyler nunca superó la muerte de su madre y se disparó con una escopeta el día de su 25 cumpleaños.

Que te jodan Lindsay Lohan!

Dana Plato.

La verdad es que Jodebú en mi mitomanía casi enfermiza es algo que me recontraflipa por muy mierdoso que sea. Tú ponme a ver una de esas casas de estilo español en las que Fatty Arbuckle metía botellas de gaseosa por el coño a sus fans, Errol tocaba el piano con su enorme verga o Rob Lowe se grababa con menores y seré feliz. Ya si me topo con alguna estrellona, alcanzaré el nirvana:

Harry El Grande!

Una estrellona de verdad, quería decir:

El rey de las camas.

Eso sí, en L.A. podría decir que vamos a ir al Centro Getty a ver la expo que están dedicando a otro de mis dioses, el gran CARL VAN VECHTEN y esa obra llena de morenos/as prodigiosos/as que posan en vivos colores sobre fondos de estampados increíbles que son fuente de inspiración constante (por lo menos para mi). Pero mentiría, pues como que no existe dicha exposición y además nuestra nula capacidad motriz al frente de un automóvil hace poco probable que podamos acercarnos a tan magnífica construcción y así observar el increíble paisaje que proporciona esa jungla de asfalto y la inmensa boina de mierda que la corona.

Simplemente no sabía como meter a este buen hombre en el post de hoy y como que me urgía ya deshacerme de su carpeta...

Y es que si sus obras en B/N son la leche:

Lena Horne © Carl Van Vechten
Jean Marais © Carl Van Vechten.
Tallulah Bankhead © Carl Van Vechten.
Salvador Dalí © Carl Van Vechten.
Orson Welles © Carl Van Vechten.
Truman Capote © Carl Van Vechten.
Truman Capote © Carl Van Vechten.
Carson McCullers © Carl Van Vechten.
Salvador Dalí © Carl Van Vechten.
Alexandra Danilova © Carl Van Vechten.

Cuando se pone colorista... Mamma Mia!:

Pearl Bailey © Carl Van Vechten.
Diahann Carroll © Carl Van Vechten.
 Diahann Carroll © Carl Van Vechten.
? © Carl Van Vechten.
Bill Strayhorn © Carl Van Vechten.
James Earl Jones  © Carl Van Vechten.
Alvin Ailey © Carl Van Vechten
Joyce Bryant © Carl Van Vechten.
Joyce Bryant © Carl Van Vechten.
Margaret Tynes © Carl Van Vechten.
Marion Anderson © Carl Van Vechten.
Nora Holt © Carl Van Vechten.
Pearl Bailey © Carl Van Vechten.
? © Carl Van Vechten.
Margaret Tynes © Carl Van Vechten.
Eartha Kitt © Carl Van Vechten.
Pearl Bailey © Carl Van Vechten.
? © Carl Van Vechten.
? © Carl Van Vechten.
? © Carl Van Vechten.
Harry Belafonte © Carl Van Vechten.
Diana Sans © Carl Van Vechten.
Dorothy Taylor © Carl Van Vechten.

Y ya que nos hemos sincerado, también me voy a deshacer de estas fotos de Oliviero Toscani que me parecen palabras mayores basadas en La Pasión de Cristo hechas allá por mediados de los 70:

© Oliviero Toscani.
© Oliviero Toscani.
© Oliviero Toscani.
© Oliviero Toscani.

Ah, e iremos a Las Vegas, que ya no es lo que era y el RatPack, Bugsy, Liberace, la Mafia y las ganas de pecar han dado paso a los parques temáticos, Celine Dion y los horribles espectáculos del Cirque du Soleil, pero bueno, esperemos que la parte antigua y ese cementerio de neones conserven la esencia:

Elvis, su Pelvis y Anne en VIVA LAS VEGAS!
Lo siento por los del Soderbergh,que no están mal, pero en attitude estos ganan por goleada.

Que hablando del RatPack, no habrá piernas como la de una de sus miembras, la grandiosa Angie Dickinson (la otra miembra era la MacLaine):

Angie.
Dickinson.

Pd. Espero que entre tanto avión tenga tiempo de hojear alguna revista de esas de tendencias masculinas por mucho que ahora todas estén afeminadas por una panda de estilistas que tienen un ideal de hombre que se asemeja más al Alfredo Landa de No desearás al vecino del 5º que al maromo que protagoniza esta impresionante editorial de Alan Kaplan para un GQ de 1969:

© Alan Kaplan.
© Alan Kaplan.
© Alan Kaplan.
© Alan Kaplan.
© Alan Kaplan.
© Alan Kaplan.
© Alan Kaplan.
© Alan Kaplan.
© Alan Kaplan.
© Alan Kaplan.
© Alan Kaplan.
© Alan Kaplan.
© Alan Kaplan.
© Alan Kaplan.
© Alan Kaplan.
© Alan Kaplan.
© Alan Kaplan.
Que ganas de poner este copyright: © Izaro Films.

Y para descansar de tanto vaivén, antes de regresar a España, pararemos cinco días en las Bahamas, concretamente en Nassau, que aunque parezca todo como muy guay, cuanto más me informo sobre dicha isla más me doy cuenta de lo infravalorado que está Torremolinos.

Mucho guiri con sobrepeso y Springbreak etílico de fraternidades. Pues como bien decían los Hombres G:







Tengo la espalda como el culo de un mandril,
La chica del anuncio no esta por aqui.
Mucho rollo con los limones del caribe

Y luego llegas y de milagro sobrevives.

Así que si mi señora y yo no nos hemos matado ya, puede que este sea el paraje ideal para tal menester:


Aunque lo dudo, porque nos queremos mucho:


Por cierto, un regalo aprovechando el tema Disneylandia; editorial horrorosa protagonizadas por unas modelis más feas que Pifio (¿qué tan feo será este buen hombre?...)  y vestidos que no se pondría ni mi nonagenaria abuela pero que, al ser tan kitsch y conservar el extraño encanto de lo añejo pues, al final resultan ser cojonudas. Ayyy señor, si es que somos tontos del Ohio...:


BUEN VERANO A TODOS! EL DISEÑADOR DE FONDO DESPUÉS DE UN AÑO CURRANDO COMO UN PERRO Y PASÁNDOLAS COMO PUTA EN CUARESMA SE DESPIDE HASTA DENTRO DE UN MES. 

NOS VEMOS EN SEPTIEMBRE!